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Carta de Alcides Arguedas,7/10/1926

7 de octubre de 1926
Señor José Carlos Mariátegui
Casilla 2107
Lima
Estimado escritor:
La Escena Contemporánea es un reflejo profundamente fiel de la agitación política mundial y sorprende como un escritor de nuestros lejanos países pueda, por solo sus lecturas, revelar las tramas ocultas y secretas que dan tanta complejidad a los movimientos sociales de nuestra época turbada y alborotada.
Es usted, entonces, un observador penetrante y un espíritu lúcido casi enamorado de su tiempo.
Le estrecha cordialmente la mano su atto amigo
A. Arguedas.

Arguedas, Alcides

Carta de Alejandro Peralta, 7/8/1926

Puno, 7 de agosto de 1926
Señor don José Carlos Mariátegui.
Lima
Compañero: Mucho placer me ha dado el saber que llegó a sus manos mi libro "Ande", i también la recepción del suyo: "Escena Contemporánea". Jugoso i moderno libro, que he saboreado con la delectación que todo lo que Ud. escribe.
Confío en que querrá Ud. darme a conocer su opinión sobre mi obra. Su voz es la única autoridad crítica en Perú. La espero con ansia.
Con un saludos
Alejandro Peralta

Peralta, Alejandro

Carta de Alvaro Soares Brandão, 5/8/1928

S. Paulo, 5 de agosto de 1928
Señor Doctor José Carlos Mariátegui
Distinguido señor:
He tenido el gusto de leer, con mucha satisfacción, el número 11 (enero de 1928), de la revista Amauta.
Es un periódico de alta cultura que señala perfectamente, el nivel superior de la mentalidad del Perú.
Me satisface remitir a Ud., un trabajo mío sobre “Lumínica”, que acabo de publicar, y pedirle la vuestra opinión.
Agradeciendo profundamente la gentileza de Ud., y haciendo votos por vuestra felicidad, saludo atentamente al señor Doctor José Carlos Mariátegui, con mi más alta consideración.
Doctor Alvaro Soares Brandão
Dirección: Rua Backer, 9. A —S. Paulo — Brasil

Soares Brandão, Álvaro

Carta de Antenor Orrego, 20/11/1928

20 de Noviembre de 1928
Mi querido José Carlos:
Me complace mucho que sus dolencias no se hayan agravado últimamente. Recibí su último libro y espero leerlo con la amorosa atención que merece todo lo suyo para escribir una nota crítica.
Le incluyo un juicio sobre el último libro de Chávez que puede publicarse en Amauta.
Seguiré la serie "Cuál es la cultura que creará América". Le envia[ré] oportunamente los artículos sobre O[rte]ga y Gasset y Eguren.
Lamento mucho no estar en Lima para ayudarlo más eficazmente en la gran obra de "Amauta" que es momento de imprimirle su vuelo definitivamente.
Una revisión del "orteguismo" con ocasión de su venida a Lima me parece oportuna y sobre todo muy saludable.
Un abrazo afectuoso.
Antenor Orrego

Orrego, Antenor

Carta de Antenor Orrego, 29/12/1925

Trujillo, 29 de diciembre de 1925
Señor don
José Carlos Mariátegui
Lima
Querido compañero:
De nuevo he pecado por mi negligencia epistolar incurable. Pero sé que U. ha de perdonármelo. He recibido su libro. Lo estoy leyendo con la atención, seriedad y afección intelectual que merece. Por fin en el país los escritores comienzan a salir de esa frivolidad despreocupada, de esa necia banalidad ególatra al uso; de ese antieticismo artístico que es incapaz de construir nada y que los convertía en vistosos escaparates literarios.
La labor me es simpática, precisamente, por su contenido ético, por su significación social y humana, por la valerosa seriedad con que se ha colocado U. en un país de guignol en el que jamás se oye vibrar la noble pasión del hombre que se entrega a una fe. Tengo la seguridad que su obra se ha de proyectar–– se está proyectando ya–– benéficamente en nuestro país en los núcleos más puros que no tienen compromiso con el pasado, es decir, con la mentira. Porque ésta es nuestra mayor tragedia nacional. El pasado nada nos ha dejado, nada que sea susceptible de asumir cierta positiva continuidad histórica. En los demás pueblos chocan pasiones contrapuestas, pero sinceras y fervorosas. En el nuestro sólo chocan intereses materiales, sólo hay fantasmas de todo; es la máxima mentira, la mentira absoluta y auténtica, porque todo está mixtificado y desvitalizado.
Claro está que no coincido con algunos de sus personales puntos de vista. Y es lógico porque nuestras pupilas no pueden tener una idéntica y absoluta acomodación visual para mirar las cosas; pero, siento que en lo fundamental, en lo que respecta al pensamiento contemporáneo y a la acción que precisa realizar en nuestro país estamos colocados en una misma perspectiva mental e histórica. Mi sentido histórico y el suyo no parece sino que para llegar a su actual temperatura ética, se hubieran propuesto los mismos problemas y los hubieran resuelto con el mismo diapasón moral e intelectual; ambos sentimos agudamente, con idéntica sensibilidad exasperada, nuestras responsabilidades históricas, sociales y éticas. Su libro es algo de lo más serio, trabado y constructivo que se haya producido entre nosotros. Las nuevas generaciones han de agradecérselo. Tengo el propósito de escribir en El Norte un artículo reposado, donde trataré de fijar con toda la penetración, lealtad y acuidad ideológica de que modestamente soy capaz, la posición suya dentro de las nuevas generaciones nacionales. Espero lograrlo en la medida que lo deseo.
Para la difusión de su libro en el norte de la república le ofrecemos las columnas de nuestro diario. Envíeme avisos, artículos y todo lo que se ha producido o se produzca alrededor de él. Ya sabe U. que El Norte está adscrito a determinada atmósfera moral y espiritual del país y para servirla en todos sus aspectos, es que ha sido fundado. Es un hogar nuestro, tanto mío como suyo y de los demás espíritus libres que trabajan por el advenimiento de una realidad renovada y humanamente más noble y justiciera.
Le agradezco la acogida de uno de mis libros en la editorial Minerva. Habría querido enviarle el que considero más fundamental de los tres, Helios, que es un ensayo para una filosofía o interpretación del pensamiento. Por desgracia, aunque está terminado ya, no estoy satisfecho aún con su trabazón o construcción interna. Estoy harto temeroso de que mi autocrítica no sepa ubicarlo en su verdadera posición ideológica; de que mi amor propio o, simplemente, mi entusiasmo de creador le impriman una acentuación mental que rebase su estructura literal, su horizonte o realidad expresiva. Nunca he tenido más escrúpulos intelectuales que frente a este libro. Necesito, pues, reposarlo, tratar de proyectarme fuera de él antes de decidirme a imprimirlo.
Pero le ofrezco mandarle Panoramas, que es la recopilación de algunos ensayos y artículos publicados, unos, e inéditos, otros. El libro alcanzará, a lo sumo unas 150 a 200 páginas de formato corriente. Si le parece bien avíseme para darle los últimos toques y remitírselo.
Su libro ha interesado aquí bastante por los pedidos que se nos hacen; pero necesita mayor propaganda. Mándenos artículos y avisos. Alcides le informará detalladamente.
Estoy deseoso de hacer un viaje a Lima y conocerle personalmente. Espero que pronto se realice.
Le estrecho cordialmente
Antenor Orrego

Orrego, Antenor

Carta de Anterno Orrego, 19/12/1929

Trujillo, 19 de diciembre de 1929
Sr. José Carlos Mariátegui.
Lima.
Querido José Carlos:
No he tenido tiempo para contestarle su atenta tarjeta última. Tampoco lo he tenido para enviarle alguna colaboración para nuestra Amauta. Ahora le incluyo una, capítulo de introducción a mi libro Helios, que creo no carece de interés para la revista. Mi largo silencio y mi falta de cooperación en los últimos números gravitaban ya sobre mí de una manera tremenda.
Dentro de poco recibirá Ud. la visita de mi libro El Monólogo Eterno que se ha editado aquí en los talleres de El Norte. Le ruego que lo anuncie en Amauta para facilitar su difusión y si es posible alguna pequeña nota crítica.
Ya Spelucín le habrá enterado de que estuve detenido ocho días por orden del ministerio de gobierno, sin dárseme ninguna razón.
¿Cuándo saldrá Panoramas?
Muchos saludos para su señora y un abrazo fraternal de
Antenor Orrego

Orrego, Antenor

Carta de Armando Herrera, 15/11/1928

Lima, 15 de noviembre de 1928
Sr. D. José Carlos Mariátegui.
Estimadísimo amigo:
Muy agradecido por el envío de su último libro.
Yo sigo con verdadero interés y satisfacción la valiosa labor intelectual de usted por lo mismo que es intenso mi afecto y muy cordial mi admiración por el amigo y por el escritor.
Le ruego que acepte usted como siempre un cariñoso saludo de su muy dilecto amigo y compañero.
Armando Herrera

Herrera, Armando

Carta de Arturo Capdevilla, 10/2/1930

Buenos Aires, 10 de febrero de 1930
Mariátegui:
Si éste —El Apocalipsis de San Lenín— es el primer libro mío que Ud. recibe, no por ello he estado menos cerca de Ud. Admiro su obra y me entusiasma y reconforta su personalidad. Lo creo a Ud. simplemente un verdadero prócer de la definitiva libertad de América. Samuel Glusberg, que tan fervorosamente lo quiere, me da sus señas. El libro no va solo. Va también para Ud. lo mejor de mi corazón.
Le tiendo fraternalmente los brazos.
Arturo Capdevila
s/c. Charcas 779
Buenos Aires

Capdevilla, Arturo

Carta de Attilio R. Minuto, 7/8/1926

Moquegua, 7 agosto de 1926
Señor
Gerente de la Editorial "Minerva"
Lima.
Mui señor mío:
Atendiendo al cupón adjunto, sírvase usted considerarme entre los suscriptores al libro mensual que publica su Editorial, enviándome desde el primero que publicó.
Le ruego, a la vez, avisarme el valor de la suscripción, a fin de mandársela abonar a la brevedad posible.
De usted, afectísimo.
Attilio Minuto

Minuto, Attilio R.

Carta de B. Sánchez Saenz, 5/3/1927

Buenos Aires, 5 de marzo de 1927

Señor
José Carlos Mariátegui
Perú

Muchas gracias por el número 5 de "Amauta", y le confieso, que es lo mejor que apareció desde hace mucho tiempo. Calidad, idea, y ante todo un elevadísimo espiritualismo, propio del formidable autor de "La Escena Contemporánea".

! Lástima grande no tener los cuatro números anteriores como así mismo los nuevos!...

Estoy pronto a cooperar en lo que quiere...

Le mando un poema, de mi libro en preparación "Los Faroles Malditos".

¿Por que no mandan a "Caras y Caretas" la revista?

Su admirador y amigo:

B. Sánchez Saenz

Sánchez Saenz, B.

Carta de Baldomero Sanín Cano, 21/3/1929

Bogotá, 21 de marzo de 1929
Señor Don
José Carlos Mariátegui
Lima
Mi excelente amigo:
Estoy en deuda con Ud. No puede figurarse el placer tan grande que me ha proporcionado la lectura de su invaluable volumen de Siete ensayos de Interpretación de la Nacionalidad Peruana. A más de ser un análisis fecundo de la vida de ese pueblo tan interesante, tan lleno de alternativas, es una obra de justicia del punto de vista americano y del de la moral universal. Es una vindicación razonada, “Materialista”, como Ud. dice, y antirromántica de una clase social y de un principio. El caso del Perú que Ud. describe y desmenuza con tan agudo sentido histórico y con tan estrecho contacto con las realidades es el de algunos departamentos de Colombia. Para los pocos que aquí nos ocupamos en el estudio de esos problemas su libro es un derrotero, a trechos es una revelación.
Movido por los mismos sentimientos de equidad que Ud., tampoco soy criollista en el sentido estrecho que los literatos y algunos filósofos americanos (libreamericanos) le dan a este concepto. Mi educación oficial, tuve que rehacerla al comprender lo falso e incompleto de su contenido al llegar a la edad madura. Si a esa edad no hubiera pasado 16 años de mi vida en Europa, tratando de rectificar las nociones recibidas en la escuela y en los colegios y de corregir la experiencia de muchos años de lucha en este país, yo sería un ente todavía más incompleto de lo que soy. Me siento como Ud. occidental, aunque profundamente “libreamericano”.
Son muy atinados sus juicios literarios, de los cuales hay algunos que aprecio sin conocer la obra de los autores a quienes se refieren. Los que tratan de autores que me son conocidos me parecen muy bien fundados. En todos ellos la doctrina es amplia, desinteresada del punto de vista literario y bellamente expresada. La expresión es la virtud predominante del libro: hay una claridad, un desembarazo, una sencillez que cautivan al lector y le dan realce al pensamiento. Su bella manera de escribir justifica aquella definición de Oskar Loerke: “Der Geist des Stoffs heisst Form”.
Recibí también los números de Amauta y de Labor que ha tenido la gentileza de enviarme. La obra que Ud. realiza en esas dos publicaciones impone admiración y respeto por la tenacidad del empeño y por la fe de que dan testimonio en la exposición de la doctrina. Reciban Ud. y sus colaboradores el aplauso más sincero, nacido de mi deseo y de mi incapacidad de imitarlos. Mi país pasa en estos momentos por un período de achatamiento en lo ideal, que debe asemejarse mucho a la represión causada en el Perú, según Ud. la analiza, por la fiebre del guano y del salitre. Media una diferencia. Aquel estado provenía en su patria de una prosperidad efectiva que resultó efímera, el estado actual de Colombia es más peligroso porque se funda en una esperanza: ha sido designado con gran precisión en mi sentir con el título de “prosperidad a debe”. La frase de Jaurès citada por Ud. acerca de la incertidumbre de la prosperidad industrial en estos días de adelanto inesperado en la técnica, es para nosotros una amenaza.
Su libro es una obra libreamericana de valor incontestable por la enseñanza que contiene y es, por la forma, de una eficacia cautivadora. Reciba mis felicitaciones y crea en la amistad y en la admiración de
B. Sanín Cano

Sanín Cano, Baldomero

Carta de Carlos J. Manrique, 3/12/1925

Lima, 3 de diciembre de 1925
Señor Julio César Mariátegui
Gerente de la Casa Editorial Minerva
Pte.
Calle de Sagástegui 669
Muy señor mío:
Atendiendo con agrado a su estimada carta circular de noviembre, que acabo de recibir; me es grato avisarle que acepto la suscripción para el libro mensual que edite su estimada casa, el cual puede Ud. enviármelo mensualmente con su valor, para abonarlo en seguido, pues tratándose de labor emprendida por el escritor José Carlos Mariátegui, cuyo esfuerzo es admirable y ejemplar para muchos escritores, considero un deber esta aceptación, anhelándose franca y pronta prosperidad a su casa editora.
Con este motivo tengo el placer de quedar de Ud. como su muy atto. y s.s.
q.e.s.m
Carlos J. Manrique

Manrique, Carlos J.

Carta de Carlos Ríos Pagaza, 4/3/1926

Cuzco, 4 de marzo de 1926
Señor
José Carlos Mariátegui
Lima
Querido y muy recordado compañero:
Recién me es posible, agradecerle vivamente por el envío de su hermoso, interesantísimo libro: La Escena Contemporánea, que lo he leído con deleite, con emoción, admirando lo interiorizado que se halla Ud. en todos los problemas que agitan el mundo en esta torturante época que nos ha tocado vivir. Muy pronto y detenidamente, sin querer salir del paso, con cuatro frases mal hilvanadas, publicaré en El Comercio, diario que dirijo en ésta, una impresión sobre su obra primigenia, digna de su talento y amplia, amplísima, bien cribada cultura.
También muy pronto, realizaré una activa propaganda en favor de la editorial que Ud. dirige, enviándole cuanto sobre ella publique. Antes, no he hecho nada, por exceso de trabajo, por un serio quebranto de salud que sufrí hace poco y porque muy burguesamente, me preparo para colacionarme en Derecho y así conquistar un arma, que vale mucho, en una seudodemocracia como la que nos alberga y en la que se miden los hombres, más que por su capacidad, por los títulos que ostentan.
Supe que un señor Latorre se hizo cargo de la agencia de Minerva, pero a los pocos días fue conducido preso a Lima. Si Ud. gusta, puedo yo encargarme de ella. Indique y en detalle, las condiciones. Sobre cualquier otra persona del Cuzco, ofrezco la ventaja de poseer un diario en el que pueda hacer intensa propaganda y conquistar muchos suscriptores.
Igualmente, le manifiesto que tengo casi listo un tomo de novelas andinas. Dígame, podría publicarlo la editorial que dirige y en qué condiciones. Estoy seguro que la lectura de esas narraciones, le gustarían mucho, de veras. El mujik peruano, el bronce andino, está presentado en ellas, al desnudo, con sus vicios y supersticiones, prácticas, creencias, costumbres más típicas y también su dominador, el gamonal. Luego, el paisaje tiene su lugar en esas fábulas, ya que hay mucho de panteísmo en las creencias indígenas y el cobre andino está vivamente influido del medio telúrico que lo rodea.
Posiblemente, dos o tres de esas narraciones aparezcan antes en La Prensa de Buenos Aires donde he logrado obtener un contrato ventajoso, pero yo quisiera que mi primer libro aparezca en mi tierra, como un homenaje a la pequeña patria que se llama el Perú. Después, ya vendrán otras editoriales. Todo es cuestión de tiempo, de propaganda y una voluntad siempre en tensión vigilante, obrando y reobrando perennemente.
Haga suya, muy suya, la viva simpatía espiritual, de su antiguo compañero de labores y leal amigo,
Carlos Ríos Pagaza

Ríos Pagaza, Carlos

Carta de César Atahualpa Rodríguez, 26/1/1926

26 de enero de 1926
Sr. Dn. José Carlos Mariátegui
Lima
Querido amigo:
Le escribo un poco tarde por esperar a que se haga la venta de su libro y poder darle noticias satisfactorias. Desgraciadamente Arequipa es un pueblo que cada día lee menos, y que no presta esperanza. Sólo el remordimiento de que U. pudiera creer que me he desentendido de sus encargos, me obliga a ponerle esta carta antes de hacer tangibles mis buenos deseos.
No puede U. figurarse cuántos discursos me cuesta la venta de ocho ejemplares de La Escena Contemporánea. Cada comprador, para decidirse, me clava los ojos pretendiendo escrutar en los míos el contenido del libro que le ofrezco. Y entonces, claro está, tengo que soltar la lengua, haciendo lujo de una verbosidad pintoresca, que hasta el momento me era desconocida. A este paso acabaré por hacerme orador.
León Albareda me dice que ha vendido cinco ejemplares, derrochando el doble de elocuencia. Así está la gente de torpe. Lo que me estoy riendo de mis dotes menguadas para el comercio. Sin embargo, y a pesar de todo, me he propuesto concluir con el lote. Ya tengo promesa de negociar cinco ejemplares más; sólo que, como en una de las tapas del libro está marcado el precio, no puedo vender a más de un sol ochenta cada ejemplar. Estos borricos no quieren entender que se gasta en sellos de correo y que se paga comisión al librero.
Tan luego de que me convenza de la imposibilidad de realizar un solo libro, le remitiré el dinero; a no ser de que U. disponga otra cosa.
Querido amigo, le suplico se sirva avisar al Director de La Humanidad que me envíe carteles de anuncio para fijarlos en los puestos en que se vende el semanario. Sin réclame es imposible entusiasmar a las gentes. Hasta hoy día se llevan vendidos 25 ejemplares del primer número. El segundo, recién ayer lo he puesto a la venta, por haberse retrasado en el correo. Dígale también que sería bueno envíe los dos primeros números a los diarios de esta ciudad, que son: El Pueblo y El Deber, con el objeto de que hagan propaganda. Yo no lo hago, por no malograr el asunto: hay que evitar suspicacias. Rotulado el envío desde Lima tiene más suceso.
Como U. ve, tengo sobrada voluntad para servir a mis buenos amigos; pero la plaza no responde como debiera.
Le agradezco mucho el obsequio de su libro y la dedicatoria. Por falta de tiempo no le digo nada de él. Espero desocuparme para leerlo con todo detenimiento.
Mi viaje a ésa lo he postergado hasta que llegue mi libro de Buenos Aires. Hace un año que estoy en esa expectativa.
Con toda cordialidad
César A. Rodríguez

Rodríguez, César A.

Carta de César Atahualpa Rodríguez,14/9/1925

14 de setiembre de 1925
Sr. Dn. José Carlos Mariátegui
Lima
Distinguido amigo:
Hace mucho tiempo que no sé de Ud. nada íntimo, que no nos escribimos. Si no leyera sus interesantes artículos de Variedades, ignoraría por completo de su vida. Dígame: ¿me tiene olvidado? Robe unos instantes a su intensa labor periodística, y póngame cuatro letras aun cuando sea de tarde en tarde. Es un consuelo tener comunicación con los amigos inteligentes y cultos en estas tierras bárbaras.
Desde que regresó U. de Europa, he tenido ocasión de observar su campaña de cultura popular, emprendida con toda pureza, por el solo placer de barajar ideas y también por el supremo egoísmo ¿por qué no? de sentirme con cabeza, aquí donde los otros se han olvidado de que la tienen.
En un país donde todo está embargado por la política, hace U. muy bien en vulgarizar el ritmo que siguen los asuntos de esta índole en los pueblos más avanzados de las viejas culturas. Así, quién sabe, más tarde podamos responder a nuestra imperiosa necesidad de reorganizarnos.
Para probarle mi estimación, le envío, dedicado, uno de mis viejos poemas; de aquellos poemas de la primera mocedad, de cuando yo era triste; de esos poemas que ya no volveré a escribir nunca más, pero que me son dulces todavía porque conservan la nítida perspectiva de mis ideas en formación y el vivo dolor de un desarrollo prematuro, que más que dolor en el sentido lato de la palabra, fue una terrible inquietud de pensamiento. Hoy las cosas han cambiado casi totalmente. La intelectualización silenciosa, me lleva por otros caminos más serenos. Comienzo la vida de la plenitud fisiológica y quizás también la de mi plenitud conceptual. Veremos si se puede hacer algo.
Muy pronto le mandaré La Torre de las Paradojas, un libro de versos que se está editando en Buenos Aires; y si la bondad de mi editor sigue siendo generosa, le mandaré también los dos volúmenes de Hacia una Nueva Metafísica, un libro de ideas que tengo concluido. Posiblemente en el mes de diciembre me dé el gusto de llevárselos yo mismo, de paso que le doy el primer abrazo.
Muy suyo:
César A. Rodríguez

Rodríguez, César A.

Carta de Concha Romero James,1928-09-16

Santiago de Chile, 16 de setiembre de 1928
Sr. José Carlos Mariátegui
Lima, Perú.
Muy estimado señor Mariátegui,
Créame que no he olvidado el gratísimo rato que pasé en su casa a mi paso por Lima. Es uno de los mejores recuerdos que guardo de la hermosa Capital del Perú.
Le prometí, como Ud. recordará, escribirle a José Eustasio Rivera, pidiéndole que le mandara un ejemplar de su notable libro La Vorágine. Hace algunas semanas que tuve noticias que Rivera no había recibido la carta que le mandé de Lima, pero como le escribí de nuevo no dudo que dentro de algunos días tendrá Ud. en sus manos la novela que tanto le alabé. Vale la pena.
Ahora le voy a pedir un gran favor. Como Ud. recordará, le dije que mi esposo escribe para varios diarios y revistas norteamericanas entre ellos el New York Times, Current History, The Arts, Art and Archaelogy y otros. Me acaba de mandar un cable pidiéndome urgentemente que le consiga algunos libros sobre asuntos hispanoamericanos, pues se ha comprometido con el New York Times para escribir una serie de artículos sobre libros de autores latinoamericanos que tratan de los problemas que preocupan a estos pueblos, y de su vida literaria y artística. Se trata de libros verdaderamente serios y que reflejen las orientaciones de estos países —o falta de orientaciones si Ud. quiere— en materia de arte, educación, problemas políticos y sociales, relaciones internacionales, etc. Si Ud. puede recomendarme algunos libros sobre estos asuntos se lo agradeceré mucho. Y más le agradecería aún si Ud. y sus amigos escritores pudieran enviarle a mi esposo todos aquellos libros de que se puedan deshacer con facilidad y sin sacrificio alguno para que él les dé publicidad en los Estados Unidos.
Le diré que esta publicidad no es poca cosa. En el caso de La Vorágine, por ejemplo, a las cuantas semanas de haber publicado mi esposo su juicio crítico en el Times se agotaba la edición en Bogotá. La casa de Brentano en Nueva York pidió por cable a Bogotá todos los ejemplares que quedaban. Como resultado de este artículo Rivera recibió tantas propuestas de casas que querían publicar una edición inglesa, que al fin se tradujo la novela al inglés y ahora está por salir. Ya ve pues, que esto le puede convenir a todos. Le agradeceré que tome en cuenta esta proposición y que si no le es molesto colabore con nosotros en esta empresa. Y si en algo le podemos servir ya sea yo o mi esposo sabe que estamos enteramente a sus órdenes.
Le mando un cuento que me ha dado para Amauta la escritora chilena Amanda Labarca. Si no le gusta no hay compromiso de aceptarlo. Amanda es una excelente escritora, pero como cuentista yo no la conocía hasta ahora. Si no le llama la atención el cuento le puedo mandar otras cosas.
Le ruego que en caso de que Ud. o sus amigos decidan mandarle a mi esposo algunas obras, se comuniquen con él directamente. Su dirección es la siguiente: 2607 Sedgwick Avenue, Nueva York, N.Y. E.U. Y no hay que olvidar que lo que no puedan mandar lo pueden recomendar, dando el nombre de la casa donde se puede obtener.
No sé todavía cuándo podré salir de Chile. De aquí quiero ir a Bolivia y de Bolivia al Perú. Si puedo, iré antes a Buenos Aires. No dejaré de visitar el Cuzco, por supuesto. Para entonces le voy a suplicar que me ponga en contacto con algunas de las interesantes personas que Ud. conoce por esos rumbos y que se interesan en el problema del Indio. Parece que a fuerza de pedir favores lo voy a aburrir. Perdone tanta molestia, y si hay algo en que yo le pueda servir, ya sabe que nada me satisfará más.
Con finos recuerdos para la Señora de Mariátegui, y deseándole que su salud mejore cada día más, lo saluda afectuosamente,
Su amiga y segura servidora
Concha Romero James

¿Porqué no escribe Ud. algo a propósito de la reanudación de las relaciones chileno-peruanas para algún diario o revista chileno? Creo que recibirían algo de Ud. sobre eso o sobre cualquier otra cosa— ¡Hay que restablecer las relaciones intelectuales entre estos países!
Si quiere, yo les puedo abrir las puertas a los escritores peruanos, y puedo conseguir que algunos chilenos escriban para Uds. Siento que el cuento de Amanda no sea de lo mejor.

Romero James, Concha

Carta de Dionisio Mendoza, 25/1/1926

Chiclayo, 25 de enero de 1926
Sres. Editorial Minerva
Lima
Sagástegui 669
Muy señores míos:
Tengo el agrado de acusar recibo de su apreciable fecha 16 del pasado diciembre y de agradecer la designación para servir la Agencia de Ustedes en este departamento.
Junto con su citada, recibí también 16 ejemplares de la obra "La Escena Contemporánea" por el Sr. José Carlos Mariátegui, que se ha vendido casi la mayor parte. Si al caso llega acabarse y veo la necesidad de repetir sus envío tendré e l agrado de avisarle.
Las condiciones de la Agencia las acepto y espero me vayan remitiendo los demás libros conforme vayan saliendo y con la oportunidad del caso.
Sin más por el momento y en espera de sus noticias quedo de Uds.
Dionisio Mendoza

Mendoza, Dionisio

Carta de E. Rodríguez Escobedo, 7/6/1929

Arequipa, 7 de junio de 1929
Sr. José Carlos Mariátegui,
Lima.
He recibido su Libro 7 Ensayos— cariñosamente dedicado, lo que me ha llenado de júbilo. Algo o parte del contenido conocía yo antes de la publicación y luego a la llegada de los primeros ejemplares a esta ciudad; pero este volumen tiene especial significación para mí. Soy un ferviente admirador de su obra, inútil sería que quisiera extenderme en comentarios al respecto. Mil gracias.
Su dinamismo fortifica enormemente todos los sectores de esta región, me refiero solamente a la parte de la juvenilidad inquieta; Ud. debe darse cuenta meditada de su significación histórica y no cejar un punto su admirable fecundidad. Muy bueno sería que se hiciera un viaje por toda esta región sureña, le resultaría provechosísimo y cuánto significaría a nuestro esfuerzo. Es casi imprescindible esto.
Por aquí se trabaja por la común causa en la medida de las posibilidades. Allá tienen Uds. más libertad y medios. Esto no es el Perú que se conoce.
Repito mis agradecimientos y me reitero fraternalmente
Rodríguez E.

Rodríguez Escobedo, E.

Carta de Eduardo Barrios, 7/4/1927

Santiago de Chile, 7 de abril de 1927
Señor
José Carlos Mariátegui,
Lima
Mi buen amigo:
Muchas atenciones le debo y muy obligado estoy por ellas a escribirle una larga carta. Créame que es ésta una de mis preocupaciones constantes. Pero mis tareas del último par de años me han vedado todos los placeres y el cumplimiento de muchas obligaciones personales. Primero, tuve que organizar el servicio de propiedad intelectual, y luego, con mi nombramiento de Director General de Bibliotecas Públicas y de la Biblioteca Nacional, hube de emprender la reorganización de estos servicios; en lo cual me encuentro aún, sin saber cuándo terminará. Le ruego, pues, excusarme por la deuda y de excusar todavía más, que ahora le escriba para solicitarle otro servicio. Carecemos aquí de cuanto habla de la actual cultura peruana, y todo dato impreso relativo a los progresos del Perú; y yo deseo que al menos, nuestra Biblioteca Nacional reciba algunos libros y periódicos que representen el pensamiento de ustedes. Amauta y Guerrilla, que leo de punta a cabo, serían espléndidas adquisiciones. ¿Podría Ud., aunque fuera suprimiendo mi envío personal, remitir esos periódicos a la Biblioteca, desde sus primeros números? Quisiera coleccionarlos y mantenerlos a la mano para los lectores. Hay aquí, por lo demás, muchos peruanos que buscan novedades de su patria en nuestros salones de lectura. Esos y otros periódicos, como asimismo muchos libros actuales, harían en el espíritu de los chilenos estudiosos mucho mejor obra que cuanto emprenden los gobiernos con procedimientos ineficaces a causa de su descarado interés o mal encubierta tendencia. Yo, que conozco el Perú, que he vivido en Lima, que participo del carácter de Uds. en muchos aspectos, sé qué resultados daría esta comprensión y espero efectuar alguna siembra de porvenir si hago traer acá un poco del cerebro juvenil peruano. Le ruego recomendar a los escritores que me envíen sus libros, y a los editores o directores, sus periódicos. ¿Será mucha presunción?
Ya le escribiré largo, como le digo. Acaso éste sea el principio de la correspondencia que debe existir entre nosotros. Entre tanto, un cordial apretón de manos de su amigo
Ed. Barrios
s/c Eduardo Barrios, Biblioteca Nacional Santiago de Chile.

Barrios, Eduardo

Carta de Eduardo N. Martínez, 7/11/1929

Tulcán (Ecuador) 7 de noviembre de 1929.
Señor Dn.
José Carlos Mariátegui y V.
Lima
Muy distinguido señor:
La prensa de mi país, acaba de dar a conocer al público ilustrado acerca de su portentosa obra de historia nacional peruana, trabajo éste de gran aliento y que abriga generosas investigaciones de carácter histórico de enorme trascendencia no sólo para su país, sino también para los hispano americanos que advierten todos la agitación de importantes problemas americanos.
Al dirigirle la presente, abrigo el propósito de felicitar a Ud. muy calurosamente por cuanto sus trabajos van encaminados a despejar la incógnita sociológica de la incipiente cultura de nuestras nacionalidades. Las ideas que Ud. vierte por la escasa información que tenemos-han despertado un fervoroso anhelo de conocerlas, por cuanto, estamos seguros que su robusta mentalidad ha elaborado un plan ideológico nuevo, en íntima palpitación con los sentimientos que la humanidad en esta hora solemne riega nerviosamente en el fecundo campo de la ciencia.
En mi condición de profesor de historia de un colegio de enseñanza secundaria de este lugar, y confiando en la generosa amabilidad suya, me permito, pues, solicitarle muy respetuosamente las obras de índole histórica que Ud. tuviere menester
facilidad para conocimiento y estudio de los alumnos del plantel, quienes se mostrarán agradecidos por la importante deferencia suya. De otra parte, insinúo a Ud. mi admiración y respeto, confiado en que Ud. sabrá en esto aquilatar mi íntimo pensamiento dirigido a un verdadero compañero que labora afanosamente por la cultura americana, en esta época en que los sentimientos fraternales y sindicalistas forman el lazo de unión más indestructible entre los hombres que no bregamos sino por la justicia social.
Esperando ser favorecido con su atención, en nombre de mis alumnos y en el mío propio, anticipo a Ud. - mis mas profundos agradecimientos, y teniendo a mucha honra suscribirme de Ud.
Muy atento compañero.
E. N. Martínez
Dirección:
Eduardo N. Martínez
Prof. del Colegio Nacional "Bolívar"
Tulcán (Ecuador)

Martínez, Eduardo N.

Carta de Elvira García y García,24/11/1925

Lima, 24 de noviembre de 1925
Muy distinguido señor y amigo:
Tiempo ha que deseaba remitir a Ud. a mis obras y ponerme a sus órdenes; pero quería hacerlo personalmente, porque un deber de compañerismo me atraía hacía el amigo, que sufre cruel dolencia , ocupaciones implazables, extraordinarias y cotidianas, me privan en ocasiones de toda libertad, restándome hasta estas compensaciones espirituales, sin las cuales, poco tenemos que agradecerle a la vida.. Mientras satisfago el vivo deseo de buscar a U. para sentir la palabra de U, que tanto admiro y aplaudo, a través de su brillante pluma, me permito el obsequiarle los libros que he escrito últimamente, y que no presentan, sino un tanto de la experiencia adquirida en la ardua tarea de modelar el alma dela mujer.
Creo que con este motivo, quedará rota la muralla de nieve que nos separaba, y que me sentiré muy honrada, si acepta que le considere en el número de mis amigos.
Créame es muy muy affma amiga y SSS
Al señor D. José Carlos Mariátegui

García y García, Elvira

Carta de Enrique Bustamante y Ballivián, 4/12/1925

Diciembre 4 de 1925
Mi querido Mariátegui:
En Arequipa y en esta he podido ocuparme algo de su empresa. En esa después de hablar con Albareda y con Rodríguez, saco como consecuencia que lo mejor es que se dirija usted al primero a quien se debe mandar los ejemplares Albareda cree que se pueden colocar diez y Rodríguez algo más. A manera de ensayo puede usted enviar veinte a Rodríguez, quien me ha prometido hacer propaganda personal y colocar los ejemplares. La otra librería ha seguido el camino de tantas, la quiebra.
En La Paz he hablado con Gustavo Adolfo Otero, uno de los más prestigiosas escritores y periodistas bolivianos, persona muy amiga mía, seria y solvente, casado con una hermana de Alcides Arguedas. Otero está pronto ha encargarse tanto de la colocación de los libros, como de su propaganda. Cree que se pueden colocar cincuenta en todo Bolivia y él hará el reparto y se entenderían únicamente con él. De hecho puede usted hacer que le envíen los cincuenta ejemplares de "La Escena Contemporánea" y de los que vengan. El los recibiría en consignación con el descuento que ustedes hicieran 25 o 30 %, o enviaría en las condiciones de reciprocidad de descuento libros bolivianos. El haría los arreglos con los libreros de aquí para el canje y en todo se entenderían exclusivamente con él. Es persona capaz de enviar cosas que tengan salida y que contribuyan a establecer un interesante intercambio. De primera intención hemos escogido los siguientes libros:
La máscara de estuco, de Bedregal, Historia Financiera de Bolivia, de Casto Rojas, Mitos y Leyendas y costumbres supersticiosas de los indios de Bolivia, de Rigoberto Paredes, Parábolas, de Sanchez de Bustamante, Taras de Nuestra Democracia, de Carlos Romero, La democracia en nuestra historia, de Bautista Saavedra, Raza de Bronce y Vida Criolla, de Arguedas, La ciudad única, de Jaime Molina, rosario de Leyendas, de Ostria Gutierrez. La epopeya de Bolivia, libro por aparecer, de Reynolds, Parnaso Boliviano, de José Eduardo Guerra, El hombre del tiempo heroico, estudio sobre Sucre, de Gustavo Adolfo Otero, recién publicado.
Le mando dos listas de obras bolivianas de Renacimiento y de La Universitaria, para que usted escojas las obras que puedan interesarle y que todas ellas pueden serle remitidas en las mismas condiciones, por Otero.
Otero tiene en preparación, y estará listo en seis meses más, un libro, Ideología Boliviana a través de un siglo, en el que estudia la influencia cultural de Europa en los hombres y en las cosas de Bolivia, política, educación, literatura, legislación, etc, etc y que creo que podía interesarle a usted para su biblioteca, Otero es prosador con más prestigio entre su generación y él está pronto a enviarle los originales. Cuando se pongan en comunicación pueden definir este asunto.
En los pocos días que he descansado en esta a penas tengo tiempo para nada y por eso le escribo a la carrera y en una forma endemoniada, pero creo que lo suficiente para ser entendido, pues ni siquiera tengo tiempo para leer y corregir esta carta.
Salude usted a todos los amigos y cuente con la devota amistad de
Enrique Bustamante y Ballivián.

La dirección de Otero es: Gustavo Adolfo Otero, La Paz - aquí no hay carteros.

Bustamante y Ballivián, Enrique

Carta de Enrique Bustamante y Ballivian, 6/1926

Río de Janeiro, junio de 1926
Mi querido Mariátegui:
Por Vegas de quien acabo de recibir una carta sé que usted me ha escrito dos. Sólo he recibido una y tengo curiosidad de saber lo que diría la segunda.
He esperado hasta ahora el envío de sus libros. Mande usted quince dirigidos a mí por paquete certificado a Librería Española 13 de Maio, 13, o a la Legación. Viniendo certificado y no siendo carta llega de todas maneras. Creo que eso se puede vender y yo procuraré mandarle lo más pronto su valor. Después podemos estudiar si es posible ampliar la cosa para San Pablo y otras ciudades del Brasil. En San Pablo el movimiento de vanguardia es mucho más intenso que en Río.
He dado su dirección a varios autores que han publicado libros últimamente, para que se vaya usted enterando de literatura brasilera y poniéndose en contacto con la gente de aquí. Como sólo tenía un ejemplar de su libro no me ha sido fácil hacer propaganda. Hay entregado ya un artículo sobre él y espero que salga para mandárselo.
Qué hay de nuevas obras. Aquí acaba de salir una novela, El Extranjero, que por lo que tiene de brasilera y de americana, de vida de emigrante y de vida nuestra en todos sus aspectos, es la obra en prosa moderna más interesante del Brasil. Le he escrito al autor que es de San Pablo y creo que se la debe de haber mandado. Creo que quizás podría ser un éxito.
Con ésta le mando unas cuantas líneas y un recorte para Bazán cuyo libro es el primero de los que he traído que ha sido comentado. Hay una completa crisis de revistas y de libertad de expresión —censura, estado de sitio y toda la pereza que con estas cosas se relaciona. Nadie pues tiene entusiasmo. Y la vida y el trabajo son aquí tan duros y está tan mal remunerado, que es un heroísmo escribir para lo que no da una inmediata retribución.
Mil saludos a los amigos y los más afectuosos para usted de
Enrique Bustamante y Ballivián

Bustamante y Ballivián, Enrique

Carta de Enrique José Varona,12/2/1926

Habana, 12 de febrero de 1926
Señor don José Carlos Mariátegui
Lima
Muy distinguido señor mío:
He recibido el ejemplar de su interesante libro La Escena Contemporánea, con que se ha servido U. favorecerme. Ya el prefacio incita a la lectura. La haré desde luego, y estoy seguro de que será con provecho.
Reciba U. mis sinceras gracias y este testimonio de mi mayor aprecio.
Su más at. s.
Enrique José Varona

Varona, Enrique José

Carta de Enrique López Albújar, 6/2/1928

Piura, 6 de febrero de 1928
Señor José Carlos Mariátegui
Lima
Muy estimado compañero y amigo:
Me tiene Ud. en los preparativos del ajuar de la criatura que quiero dar a luz lo más pronto posible. Mi novela Matalaché se ha pasado ya de los nueve meses de la concepción y naturalmente, estoy alarmado con la demora. Feto que no nace perece o envejece. Y yo no deseo que esta hija mía salga con pelos y después de haberme agotado la paciencia con preguntitas irónicas los vecinos.
Pues bien, para lo del parto he pensado en ud. Me parece que ud. y perdone el símil a que me lleva la fuerza de la metáfora, sería un comadrón a pedir de boca. Para esto está ud. al frente de una casa editora. Y con esto está dicho todo.
Quiero editar en la Editorial Minerva, siempre que sus condiciones me convengan, aquel libro, y para eso necesito un presupuesto. Cuánto me cobraría la casa por dos mil ejemplares en papel como el de La Escena Contemporánea, con el mismo formato de página, forro de papel satinado para recibir en la portada un dibujo en tres colores, pero mayor margen en blanco que el de su libro, pues querría que tuviera el tamaño de Cuentos Andinos, 2a. edición.
Cosido, como el de su libro también. Por supuesto la corrección habría de correr a cargo de ud., de otro modo la cosa iría al fracaso, o tendría que valerme de mi buen amigo Vegas García, pero para que el libro saliera para pascua de Navidad. Y es lo que, precisamente, no quiero. ¡De mi casona demoró por esta circunstancia un año!
Quedo en espera de su respuesta. Reciba un afectuoso saludo de su amigo y compañero
E. López Albújar

López Albújar, Enrique

Carta de Enrique López Albújar,8/4/1928

Piura, 8 de abril de 1928
Sr. D. José Carlos Mariátegui
Lima
Muy apreciado compañero y amigo:
El presupuesto de impresión que le pedí y que Ud. me indica en su apreciable carta del 16 de marzo último, no tiene ya objeto, pues he comenzado a hacer la edición de mi novela aquí. He tenido que ceñirme a la cantidad de dinero de que puedo disponer, unas 70 libras que el Municipio piurano, en una hora de mecenismo, ha querido obsequiarme con tal fin.
La edición va a ser muy modesta. Su presentación ante el público capitalino va a ser igual a la de nuestras provincianas cuando se presentan en Mercaderes con sus trajecitos de confección lugareña. ¡Qué hacer! La sábana no ha dado para más. Pero lo del traje no me interesa, porque el lujo sería para peor, como dicen por acá, si la obra fracasara, que todo puede ser. La seguridad que tuve en el éxito de Cuentos Andinos no la tengo hoy con Matalaché. Y la razón es muy clara. Los cuentos por ser tales y por su novedad se defendían solos; bajaban de los Andes con el ímpetu de esos huaicos que van en pos de llanura y espacio; tenían la fuerza de su personalidad, inconfundible con la de cualesquiera otros. Y esto era ya bastante. A Matalaché temo que no le pase lo mismo. La novela es original. Ya lo creo, y hay en ella algo de la pujanza de mis cuentos; pero su asunto es inactual, de retroceso. Por eso voy a calificarla yo mismo de novela retaguardista, ya que en estos momentos el intelectualismo juvenil exige que toda producción literaria sea un salto hacia adelante y no hacia atrás. atrás. Todo esto lo he tenido presente cuando me puse a escribir Matalaché, y, sin embargo, opté por volver los ojos al pasado, a nuestro pasado provinciano, digno en mi concepto de ser llevado al libro en cualquier forma artística.
Desde este punto de vista, mi libro, estoy seguro, no le va a gustar a Ud. y a los espíritus libérrimos como el suyo. Pero es que yo también me debo a mi época y no creo que por afán de modernismo la traicione. Yo pertenezco, como Ud. ya me lo ha dicho, a la Vieja Guardia de la literatura activa del país, y naturalmente mis métodos y maneras y gustos y disciplinas tienen que estar saturados de espíritu retaguardista. Lo que no quiere decir que sea derechista en esto como en las demás actividades del pensamiento. Nací y crecí izquierdista y, a pesar de la toga, sigo siéndolo. El juez no ha matado al escritor, ni podrá matarlo nunca; ni la ley registrada en los códigos ha secado mi inspiración.
Y lo más curioso de mi novela es que la he hecho sin quererlo, a pesar mío. La comencé como cuento y acabó en novela. La evocación pudo más en mí. Es que en provincias se vive más del pasado que del presente. Por lo mismo que no tenemos delante de los ojos grandes cosas que ver y todo es mediocre hasta el aburrimiento, el alma del artista se repliega para huir y saltar hacia atrás, a la idealidad, al romanticismo, a ese romanticismo que hay en todo hombre, llámese Napoleón, Hugo, Wilson o Trotski.
Ya al tercer capítulo me enamoré del asunto y me lancé en el camino peligroso de la novelación. El asunto se prestaba. ¿Por qué no comenzar por el pasado para después llegar al presente? ¿De ese pasado qué es lo que sabemos? ¿Lo dicho en algunos libros nuestros? Pero todo eso es pobre. Nuestros literatos, fuera de Palma, no han hecho más que fantasear sobre él. Pero la verdad, su verdad, todavía yace escondida en los archivos y en las tradiciones populares. Este ha sido uno de los propósitos que me han ido empujando en esta novela. Historiar en forma novelesca el pasado nuestro.
Y dentro de este propósito está el estudio sicológico de la cuestión afroperuana, digna de estudiarse por nuestros hombres de arte y ciencia. Hagámosle con esto dúo al indigenismo. Frente al indio pongamos al negro, al zambo, al cholo, al mestizo en una palabra. Si el indio es la base de nuestra población, el mestizo es la base de nuestra nacionalidad. Y Matalaché en mi novela no viene a ser sino el símbolo de ese mestizo, buscado y tratado en su origen, para seguirlo después hasta el momento actual, que es lo que me propongo en dos novelas más. En la segunda el héroe de la novela será el hijo de Matalaché; en la tercera, los nietos.
Proyecto desde luego, porque no estoy seguro de realizarlo, pues me urge continuar una novela serrana que tengo principiada y que titularé Los derechos del amo, de ambiente huanuqueño. Esto, si el ácido úrico me lo permite, pues los años todavía no me pesan.
Por el capítulo que le remito apreciará Ud. el tono de la obra. Ojalá que no lo desilusione y lo mantenga en la idea de tomarme a firme para la Sociedad Editora Amauta algunos ejemplares, cuyo valor le dejaría para acciones de esa Sociedad.
Cuando llegue el momento le enviaré también alguna cantidad de ejemplares para propaganda.
La novela estará lista en los primeros días de junio. Va despacio, pues no hay tipo suficiente para editarla rápidamente. Hay que distribuir el tipo de un pliego para el otro. Y este retardo se aumenta con la imposibilidad de atender la corrección de pruebas en cualquier momento, pues el despacho judicial me embarga en las horas que esa corrección más me necesita.
Muy afectuosamente lo saluda su amigo y devoto compañero.
E. López Albújar

López Albújar, Enrique

Carta de Ernesto Quesada, 2/10/1926

Buenos Aires, 2 de octubre de 1926
Señor D. José Carlos Mariátegui
Lima
Distinguido señor:
He recibido–– sin carta especial, pero infiero debo a U. esta atención–– su libro: La Escena Contemporánea (Lima 1925). Lo he leído con verdadero fervor, por interesarme conocer cómo encaraba U. las múltiples cuestiones del escenario mundial en el presente cuarto de hora de la historia. Con sumo placer he visto que su información copiosa y de buena fuente, ha penetrado a lo hondo del problema del fascismo y de la manifestación cesarista de Mussolini; cuestión que, del punto de vista doctrinario, Spengler había predicho en su soberbia Decadencia de Occidente. Su apreciación del tratado versallesco y de la Liga de marras es ya asunto de otro costal: ahí me parece U. que se ha concretado mucho a sus fuentes francesas, por más que veo ––con motivo de su entrevista berlinesa con Gorki y su conversación en triángulo, por el ángulo de la María Fiodorowna–– que el alemán debe serle familiar. La parte dedicada a Rusia paréceme ––en tanto cuanto, debido a lo contradictorio de las fuentes, es dable opinar–– bastante acertada: yo mismo escribí en 1888 Un invierno en Rusia en 2 vols. después de haber estudiado in situ el problema sociológico ruso, y en 1920, esta vez a través de la “literatura de la cuestión”, tuve ocasión de volver sobre el tema: de ahí que haya leído con suma curiosidad lo que U. ha escrito sobre la revolución rusa. Todo su libro, en una palabra, merece sincera felicitación y ha condensado, como en un foco, el movimiento caleidoscópico del presente.
Lo felicito, pues por su obra.
Permítome, siquiera como retribución a su fineza, remitirle mi último opúsculo: Spengler en el movimiento intelectual contemporáneo.
muy afmo. amigo y S.S.
Ernesto Quesada

Quesada, Ernesto

Carta de Fernán Villanueva, 30/10/1929

Pucucho, 30 de octubre de 1929
Señor
José Carlos Mariátegui
Lima
De mi grande admiración señor:
Un proletario, desde este terruño ajeno, implora dádiva si podieran aceptar a Ud. señor i compañeros mas a amigos suyo, de libros revistas i periódicos de la nueva generación, pido por que tengo los motivos siguientes: Soi desheredado de la fortuna por que mis padres i con ellos sus antecesores fueron de la multitud Servum Pecum como Flor de Fango de Vargas Vila, i no puedo amasarlos por mi notoria invalidez i que antes de creerme victima de la Diosa suerte para otros diré con un Pommerey “los vicios los males no las inventa el hombre ni la suerte, las crea la sociedad que lo necesita para el disfrute de los vicios”. Por esta injusticia y grande disparate que a querido hacer de mi nuestro mitologico i supuesto Diós, que dicen; castiga a los malos, remunera a los buenos, ruego a esa legión de hombres no mezquinos, sustituyen al Dios de la historia, enviandome los Claris Verbis que tiende a mitigar la desdicha i el hambre de un Cristo que por el gozo del mundo entero redime, envíandome esas que aquí valoriza Gabriela Mistral. “Un semanario —como dijera un libro un periodico— hacen mas obras que dos Normales de Maestros i muchisimas mas que cincuenta liceos” para ver con estas valiosas dádivas, las perspectivas aunque en lontananza de la Nueva Humanidad, como vio San Juan en otupica visión la nueva Gerusalen. Mi invalidez lo celebro antes de deplorar mi honra por que desafiando al mundo parasitario trabajo para vivir i al mismo tiempo gozo. En espera de su dinamica i grata en gracia a mi pobreza. Queda de Ud. su humilde i S. S.
L. F. Villanueva
Mi Diricción:
L. Fernán Villanueva. Huamalí-Pucucho.

Villanueva, Fernán

Carta de Fernando Binvignat, 1929

La Serena, Chile, 1929
Señor
José Carlos Mariátegui,
Lima
Compañero:
Le envío un poema para Amauta. También por paquete postal La Luna de Oro, mi pequeño libro de 1926. Le agradeceré el envío de su revista.
Reciba mi cordialidad
Binvignat
Casilla 79
La Serena - Chile

Binvignat, Fernando

Carta de Fortunato Zora Carvajal, 18/9/1929

Tarata, 18 de setiembre de 1929
Señor
José Carlos Mariátegui,
Director de Amauta.
Lima.
Muy señor mío:
Confiado en la benévola acogida que presta en la revista de su cargo a las colaboraciones de carácter vernacular, me permito enviarle tres poemas de mi libro en preparación, rogándole se sirva Ud., si no tiene inconveniente, ordenar su publicación en dicha revista.
Como hasta la fecha no he tenido el honor de recibir respuesta a la carta que le dirigí el 15 de junio del presente año, sobre impresión de mi libro, ruégole encarecidamente se digne Ud. indicarme lo conveniente al respecto.
Suplicándole se sirva Ud. darme respuesta a la presente, robando algo de tiempo a sus recargadas ocupaciones intelectuales, en la lucha noble y desinteresada que viene desarrollando en pos de un elevado ideal cultural y social de la cual soy el más ferviente admirador me suscribo de Ud. muy aftmo. y S.S.
F. Zora Carvajal
Dirección: F. Zora Carvajal.- Tarata.- Vía Arica y Tacna.

Zora Carvajal, Fortunato

Carta de Francisco Ninaquispe Campos, 8/7/1930

Shorey, 8 de julio de 1930
Sr. Ricardo Martínez de la Torre
Lima
Ha sido en mi poder su atta. de 23 del ppdo, así como sus últimos despacho. Por ciertos disgustos habidos entre el suscrito y el cajero de esta empresa, un alemán déspota, no le remito ningún giro, pues tengo que solicitar a Trujillo y no consigo persona de confianza.
Yo hago todo lo posible para colocar totalmente las existencias.
Remito: 1 ejemplar Pedagogía Proletaria
Remito inmediatamente la lista de existencia de libro de la "Editorial Amauta" y el recargo por la pasta de tela, pues, el Unión Shorey, quiere tomar libros de esta editorial, todos empastados en tela (ediciones populares) para formar su biblioteca.
Remita 100 tarjetas opalina de hilo. Francisco Ninaquispe C.
100 tarjetas opalina de hijo: Teclo E. Mendoza M.
100 tarjetas opalina de Alfredo V. Tarazona V.
En espera de sus órdenes que serán debidamente atendidas, me suscribo atto y S.S
Francisco Ninaquispe C

El modelo de letra es de la que va adjunto, la que se servirá remitírmela meramente.
Vale

Ninaquispe Campos, Francisco

Carta de Franz Tamayo, 13/2/1929

La Paz, 13 de febrero de 1929
Muchas gracias de Franz Tamayo al eminente José Carlos Mariátegui por sus siete Ensayos sobre cosas de nuestra América, libro en que los americanos seguiremos estudiando y aprendiendo muchas cosas de las infinitas de nuestra gran patria continental. Esta vez el guía es magistral y además un hermano de las más queridos.

Tamayo, Franz

Carta de Gabriel C. del Mazo, 11/1/1929

Buenos Aires, 11 de enero de 1929
Estimado amigo Mariátegui:
Muchas gracias por su envío de los Siete ensayos, contribución valiosísima a nuestra bibliografía, y por los números de Labor, esfuerzo que admiran, aun después de estar acostumbrados al milagro de Amauta. Me dice usted en su tarjetita que no tiene noticias mías. Sin embargo le he escrito, y repetidamente— a su dirección de Casilla. ¿De nuevo la censura para usted? Las listas que le envié no son de suscriptores sino de suscriptores presuntos. Son direcciones calificadas que recogí en mis viajes recientes por el interior. No deje de enviarme Labor ni de remitirlo a las listas argentinas. Nunca me dijo usted si había recibido la cartulina que firmamos aquí cuando su prisión del 27. ¿Se ha perdido también?
¿Recibió la colección completa de La Reforma Universitaria? ¿Nunca se decidió a completar su excelente estudio, que aquí publicamos en folletos, hecho sobre la base de parte de ese material de documentos? Debo rectificarle un pequeño error. La declaración de principios que usted transcribe al final de ese trabajo no pertenece a estudiantes de La Plata, sino al partido reformista “centro-izquierda”, interesante agrupación de estudiantes de derecho de Buenos Aires. Posiblemente su error provenga de haber tomado el dato de Sagitario que era revista platense.
He entregado a Herrera su envío y me dice le escribirá a usted pronto; en cuanto termine sus exámenes.
¿Apareció la reimpresión del N° 1 de Amauta? Si es así no se olvide de enviármelo y decirme cuánto vale y cuánto una colección completa.
Un fuerte abrazo
Gabriel del Mazo

Del Mazo, Gabriel C

Carta de Gamaliel Churata (Arturo Peralta Miranda), 10/9/1928

Puno, 10 de setiembre de 1928
Señor José Carlos Mariátegui
Lima.
Querido compañero:
Ayer le puse una carta adjuntando algunos pliegos de Tojjras, por franqueo ordinario; pero veo que olvidé el principal objeto de ella.
Usted me decía que estaba imprimiendo sus ensayos nacionalistas, en un libro. Creo haberlo visto anunciado, también en Amauta. Muy bien. Lo felicito. Pero vamos a lo que yo puedo hacer por ese libro. Es decir, si a usted le parece bien. Tan luego como esté para ponerse a la venta, me hace un telegrama, avisándome el hecho, y yo, por intermedio de la Agencia Titikaka, le hago la debida réclame. Entonces, por telégrafo, también, le pido determinado número de ejemplares. Ya verá usted que busco servirlo, y sobre todo, servir a estos borricos, cuya última genialidad consiste en blindar de metales caros el hocico de la bestia. Ya usted debe saberlo. A la bestia hay que detestarla más que por ella por culpa de sus borregas. ¿Le parece lo dicho? Me hará usted el bien de avisármelo.
Luchamos acá con múltiples y asquerosos enemigos. Puede decirse que entre hundirnos para siempre en el fango, hemos decidido tirarnos a flotar sobre él. ¡Figúrese el adefesio de obra que hacemos a la legión de rameras que nos joden a diario!
Bueno, un cariñoso abrazo y siempre mis deseos por su magnífica conservación.
Churata

Gamaliel Churata ( Arturo Peralta Miranda)

Carta de Gamaliel Churata (Arturo Peralta Miranda), 11/1/1929

Puno, 11 de enero de 1929
Querido compañero Mariátegui:
Anduve lleno de múltiples atingencias en estos días, a punto de haberme visto privado casi siempre del tiempo necesario para atender a mi correspondencia.
Los primeros minutos los dedico a usted, para desearle un nuevo año repleto de esperanza y para agradecerle el obsequio de Siete Ensayos, cuya lectura, ciertamente, ha sido mi mejor regalo de estos días. Ya sé yo que es mucho lo que se tiene que aprender en sus enseñanzas y por ellos mismo es que anhelo una continuada bienandanza en su salud.
Algo que me ha llamado fuertemente la atención, es la prescindencia que hace de Alejandro al ajustar un momento de nuestra literatura. Veo que alcanza usted a Mamani y olvida por modo sorprendente el papel histórico de Ande en nuestras letras, y en nuestras letras cuando vienen a representar un síntoma político. Juzgo, en todo caso, que usted ha omitido involuntariamente la crítica de "Ande" y de su tendencia, ya suficientemente generalizada y valorizada para que sea posible olvidarla.
Desgraciadamente estoy en deuda con usted. Y ahora creo que se concluye mi paciencia. Los agentes de provincia toman a broma mis circulares, y me obligan esta vez más a cancelar yo sus deudas como ya la vez pasada ocurrió. Así, lamentando el fracaso de mis entusiasmos, tengo que optar por una resolución definitiva, que le ha de comunicar Martínez.
Un gran abrazo de su compañero y crea siempre en su admiración y cariño.
Churata

Nota: Le envío certificados libros que para usted mandan Pablo de Rocka y su mujer, Winet.-ale

Gamaliel Churata ( Arturo Peralta Miranda)

Carta de Gamaliel Churata (Arturo Peralta Miranda), 27/11/1926

Puno, 27 de noviembre de 1926
Querido compañero
Carlos Mariátegui:
No tiene U. que agradecerme por la colaboración que presto a Amauta y Minerva. Cuando los hombres se reúnen con fines humanos, la colaboración es obligatoria y entonces el agradecimiento sobra.
Desde los primeros años declaré mi credo revolucionario. Cuando U. probablemente se nutría de selecta literatura, lo que sin duda le ha procurado esa admirable pureza y agilidad de su expresión, yo vomitaba (siempre sólo podré hacer eso) toda la dinamita que la esclavitud del indio producía en mis nervios. A los quince años desafiaba a duelo a un gamonal, a causa de los indios, y a los diecisiete me encarcelaban a causa de haber insultado el gobierno de Benavides. Soy, pues, orgánicamente, un vanguardista (en verdad que la palabra también me ha cansado) y mi colaboración a su labor obedece a eso, como a eso obedecerá la que preste cuando el momento de la liquidación haya llegado. Vuelvo a decírselo. No tiene nada que agradecerme.
Amauta y las publicaciones Minerva se venden en varios puestos, el principal en la librería Nueva. Esos señores perciben el premio que Uds. fijaron. De manera que puede U. tener la seguridad de que mi actividad será completa y alegre para colaborar con U. la obra que se propone (sólo conozco su espíritu; su programa no aunque huelga conocido aquél) y porque me doy cuenta de su importancia.
Ahora venga El Gamonal de las orejas. Su juicio me agrada. Tenía que venir así. Yo soy también blanco de conciencia y gusto de las palabras escuetas. Ha acertado U. y no podría ser de otra manera, puesto que es U. un hombre de corazón y un crítico perspicaz y bien documentado. Precisamente me proponía no llegar al relato al hacer un panfleto: El Gamonal, según entiendo, es una composición donde no escasea la vida expresada por una bestia de nervio sensible.
No; nunca tuve la idea de enviarle eso para la publicidad. Conozco las concesiones que una revista tiene que hacer, para subsistir. Yo buscaba su opinión, ésta ha llegado y ha llegado limpia y ventilada y además certísima y me basta, querido compañero. Y gracias le sean dadas por este consejo y los que todavía pueda darme en el curso de nuestra ingenua actividad de escribientes.
Le ruego decir al señor Gerente mis recados respecto a pedidos de libros que le hice, y recomendarle me envíe algunos catálogos de obras nuevas que tengo unas diez librejas para comprar libros. Deseo la Revista de Occidente, una colección y una suscripción para el año que se avecina.
Le abrazo cordialmente, compañero Mariátegui. Este movimiento cordial que nos une, tiene entre tantas ventajas, la de aproximar a los hombres, rompiendo las distancias que inventó la cortesía burguesa. Suyo
Churata
Tan pronto como pueda voy a arañarme algo para Amauta.
Sin compromiso de publicidad, le remitiré pronto algunos trabajos de muchachos de acá, por si los juzgue de interés. Sobre todo de orden sociológico.
Sabogal me devolvió Tojjras. Cuánto lamento que su amable solicitud haya llegado tardía.
Otro abrazo.
Le ruego dar El Gamonal a Magda, quien deseo que lo conozca.

Gamaliel Churata ( Arturo Peralta Miranda)

Carta de Gamaliel Churata (Arturo Peralta Miranda), 4/2/1926

[Transcripción literal]
Puno, 4 de febrero de 1926
Señor Gerente de la Editorial Minerva
Sagástegui 669
Lima
Muy señor mío:
Sírvase Ud. retirar de la presente la cédula que acredita a la Biblioteca Pública de Puno, como suscritor de las ediciones "Minerva".
La forma de pago no me es posible como Ud. indica. Sólo puedo hacerlo en vista de la factura y mejor, al frente de constancia duplicada por el pago adelantado de un año. En ese sentido le ruego si está dentro de sus posibilidades, remitirme, junto con el libro de José Carlos Mariátegui.
Tal vez U. no ignore que la organización de nuestras comunas exige esta clase de trámites.
Toda publicación de esa editorial nos interesa vívamente. Dígnese, por ello, remitirnos el Boletín Bibliográfico y notificarnos con anticipación la salida de la revista que ofrecen.
Con este motivo ofrezco a U. un nuevo amigo y servidor.
Nota:- Sírvase mandarme catálogos o listas lo más completas de su Librería.
RH.
Arturo Peralta

Gamaliel Churata ( Arturo Peralta Miranda)

Carta de Guillermo de Torre, 16/6/1929

Buenos Aires, 16 de junio de 1929
Sr. José Carlos Mariátegui.
Mi querido amigo y admirado compañero:
Le agradezco mucho el envío de los últimos números de Amauta y de su magnífico y convincente libro 7 ensayos. Me ha sido grato volver a adquirir contacto con sus escritos y con su revista, de la que había perdido casi la pista —con excepción de algún número que encontré aquí en la librería de Samet— desde que dejé Madrid. Pues aunque le parezca extraño —y ésta es una simple observación, sin que pretenda complicarla con ningún argumento “meridiánico”— desde Madrid se tiene —el que quiere y puede tenerla— una visión más completa y global del movimiento literario de todos los países de América que desde Buenos Aires. Esto no quiere decir que desde aquí no se vean, a su vez, muchas cosas, y especialmente Europa, tan bien como por el espectroscopio de Keyserling...
No quiero decirle nada aún de su libro, porque sé que a Ud. no le satisfaría un elogio banal y porque antes quiero leer en su integridad todos los capítulos. Después si ningún colaborador de Síntesis (trabajo en La Nación, en su suplemento literario, como sabrá, pero allí apenas escribo con firma) se me anticipa —cosa no presumible— le haré ahí una nota efusiva.
Le agregaré que me han interesado mucho sus estudios sobre Defensa del marxismo. En unión de la lectura sincrónica de un libro recientísimo de Emmanuel Berl —Mort de la pensée bourgeoise se llama— han contribuido a despertarme una apetencia de curiosidad sobre un sector de ideas políticas, que yo antes— totalmente entregado a las de índole estética y filosófica— no creí poder ‘sentir’ de cerca. Así se lo he dicho a nuestro común amigo el uruguayo Morenza, felicitándole por el artículo que le ha dedicado a Ud. en La Cruz del Sur.
Si Amauta sigue publicándose —¿qué tal esas dificultades?— me gustará mandarle más adelante algo mío, con algún dibujo de mi esposa Norah Borges, de la que ya salió algo en esas páginas.
Enhorabuena por sus actividades y un saludo amistoso de su afmo.
Guillermo de Torre

Torre, Guillermo de

Carta de Guillermo Mercado, [1928]

A José Carlos Mariátegui:
Lima
Compañero:
Solo hoy puedo escribirle después de muchos meses de silencio. Que quiere, amigo, si la escuela, hoy en día, el envío de mi libro me tienen muy atareado.
He visto el último "Amauta" está lindo el número, pero extraño el anterior formatun.
El nuevo compañero que le hace entrega de esta carta le dará noticias más cercanas mías. Sobre todo de mi trabajos actuales.
Agradéscole, igual que el espíritu de la revista el comentario inteligente que hace de mi libro. Ya escribiré al querido Varallanos.
Hoy solo le saludo con la lealtad y afecto de siempre, tenga en mí siempre al compañero trabajador que a diario estira sus músculos porque el pueblo salga de la escuela.
Un abrazo.
Guillermo Mercado

Mercado, Guillermo

Carta de Guillermo Mercado,24/2/1928

Arequipa, 24 de febrero de 1928
Señor José Carlos Mariátegui
Lima
Compañero José Carlos:
Antes de ahora no he podido escribirle. Cuántas cosas, cuántos hechos también me han impedido de este verdadero gustazo mío de comunicarme con usted.
Desde aquella vez que estuve en su casa seguramente no ha tenido noticia de mi vida. Mire Ud., estuve en Sicuani, lugar en donde he servido todo el último año. Casi puedo decirle que es ahí donde justamente he sentido el grito auténtico de la nacionalidad. Es ahí donde se conoce y se sabe cómo es el peruano. Muchas cosas tengo, querido Don Carlos, que habré de decirlas al Perú de este su verdadero gran Vientre.
Hoy por hoy le doy la nueva de la publicación de mi segundo libro que se llama Un Chullo de Poemas editado nada menos que al pie del Ande mismo en los talleres tipográficos del valiente José Z. Portugal. Usted ya verá mi libro. Se lo mando por manos del compañero Francisco Pastor, alto espíritu que Ud. ya conoce.
Le envío también el grabado en jebe de la carátula de mi libro, cuyo original es obra del artista andino Lucas Guerra Solís, a quien también conocerá Ud. por referencias. Ojalá me pueda hacer el reconocido servicio de publicarlo en Amauta para los efectos de la mayor propaganda de mi libro. Favor es éste que me permito pedírselo por la franca amistad que nos une, querido Don José Carlos.
Además, en próximo correo le certificaré un paquete de mi libro para la venta en la tienda de su Editorial, con este fin le suplico me diga Ud. cuántos ejemplares puedo remitirle.
También preparo interesantes conferencias que las diré en esta ciudad, con referencia a Educación indígena para después enviárselas para Amauta.
Tenga la bondad de recibir mis agradecimientos anticipados por los favores pedidos. Ojalá la nota sobre la aparición de mi libro la haga Ud querido Don José Carlos.
Un fraterno abrazo de su compañero
Gmo. Mercado

Mercado, Guillermo

Carta de Horacio Castro Videla, 9/1/1925

Buenos Aires, enero 9 de 1925
Horacio Castro Videla Subdirector de La Prensa, saluda con su consideración más distinguida al señor José Carlos Mariátegui, y se complace en agradecerle el gentil envío que le hizo de su libro "La Escena Contemporánea".

Castro Videla, Horacio

Carta de J. I. Burbano R., 21/8/1930

Paita, el 21 de agosto de 1930
Señor Director - Gerente de Amauta
Lima
Muy señor mío:
Tengo a honra contarme entre los amigos de Amauta y deseando, en calidad de tal, cooperar de alguna manera a su
sostenimiento, he formulado un pedido de algunos de los libros que distribuye esa Empresa, remitiéndole adjunta a la presente
su valor aproximado en cheque # 00415, librado a favor del suscrito por el Banco Central del Ecuador a cargo del Anglo South
American Bank Ltd. de esa, por la suma de Diez, 63/00 soles peruanos de oro, que ha endosado a la orden de Ud. (Inc. 2 ctvs. timbres)
El detalle del pedido es el siguiente:

  • 1 ejemplar de 7 ensayos de interpretación de la Realidad Peruana - Mariátegui
  • 1 ejemplar de El pueblo de dios - César Falcón
  • 1 ejemplar de El partido bolchevique en acción - Lenin
  • 1 ejemplar de El estado y la revolución - Lenin
  • 1 ejemplar de La derrota - Fadeiev
    Oportunamente renovaré también mi suscripción a la Revista.
    De Ud. atto. y S.
    J. I. Burbano R.

Burbano R., J. I.

Carta de J. Lizardo Palacios, 12/5/1926

Tarma, 12 de mayo de 1926
Señor:
Julio César Mariátegui
Lima
En mi poder su atenta fecha 30 del mes pasado de la que he tomado debida nota, comunicándome que he sido designado para la representación de las ediciones de la editorial "Minerva", en esta ciudad.
Para el efecto le adjunto una lista de los ejemplares, por lo pronto puede Ud. enviarlos tan luego como le sea posible, y según como se presente el negocio, ya le diré oportunamente.
Sin más y en espera de las suyas, me es grato suscribirme de Ud. su atento.
S.S
J. Lizardo Palacios.

Palacios, J. Lizardo

Carta de J. Lizardo Palacios, 3/8/1926

Tarma, 3 de agosto de 1925.
Señor.
Julio César Mariátegui
Lima
Muy Señor mío;
Me es grato comunicar a Ud. que tuve el agrado de recibir los cinco ejemplares de la obra de Iberico Rodriguez o sea el "Nuevo Absoluto" y lo s 16 números de "Libros y Revistas". Pero según veo en la carta de Ud. que también me envió "La Escena Contemporánea" de J. C. Mariátegui la cual debo manifestar a ud que no he recibido, ni tampoco existe en el correo, creo que pueda ser un equivoco de la casa.
Espero que se digne Ud aclarar este punto tan luego cómo le sea posible .
En espera de su respuesta, soy de Ud. su
atto.i S.S.

Palacios, J. Lizardo

Carta de J. Vicente Cuentas Zavala y J. Alberto Cuentas Zavala,11/2/1928

Juli, 11 de febrero de 1928

Estimado amigo:

El dos de Junio, del año en curso, cumple cien años de fundación la ciudad de Juli, como capital de la provincia Chucuito. Por este motivo, los suscritos, han iniciado la impresión de un álbum gráfico: literario, industrial, social y comercial de esta Provincia, cuya dirección artística corre a cargo de los fotógrafos Vargas Hermanos de Arequipa, cuyo prestigio internacional, es seguridad de triunfo.
Este álbum será la exposición de los valores intelectuales, morales, sociales, comerciales y materiales de la Provincia de Chucuito. ¿Qué existen ellos? No cabe duda. Juli, ciudad centenaria, fue el asiento de una gran civilización, cuyos vestigios se conservan aún, derruidos por el tiempo, y por el abandono e inercia de sus hijos. Recién han sido considerados por el Gobierno, como templos nacionales. A agitar esos triunfos pasados y perpetuarlos en la fotografía explicativa, va dirigida la impresión de este álbum, que no dudamos ha de corresponder a las necesidades eugénicas y a los valores incomparables de la raza aymara en la historia del Perú.
Además, queremos darle a la obra un sentido nacionalista, que no es posible desestimar en la hora presente, porque la cultura de Chucuito, tuvo un sentido exclusivamente general e integral, con la fundación de su imprenta por los Jesuitas el año 1612. Y para conseguir este objeto, es que nos dirigimos a usted para que se sirva enviarnos una colaboración para el dicho álbum, de sentido exclusivamente indigenista o apropiado a la efemérides que vamos a conmemorar. Esta colaboración, para nosotros de valor incalculable, hemos de estimar sea remitida a esta ciudad y dirigida a los suscritos antes del primero de abril próximo, para efectuar la conveniente distribución, previas las seguridades respectivas para evitar la pérdida de tan valioso contingente.
Toda la generosidad de vuestro envío, tendrá la gratitud de los iniciadores, y de la Provincia de Chucuito.
Agradecemos anticipadamente vuestra colaboración y en espera de ella, somos sus afectísimos y SS. SS.
J. Vicente Cuentas Zavala J. Alberto

Cuentas Zavala, J. Alberto

Carta de Jacobo Dante y Oreste Plath

Le comunican sobre la propuesta de organizar una Representación de Escritores con el fin de poder reunir a los diversos autores y venderlas sus obras al público. Le explican cómo serán las condiciones y cómo puede participar.

Danke, Jacobo

Carta de Jaime L. Morenza, 26/6/1929

Montevideo, 26 de junio de 1929
Sr Dn.
José Carlos Mariátegui
Lima Perú
Mi distinguido compañero y amigo:
Recibí su carta que no contesté por falta de tranquilidad, pues desde hace varios meses tengo mi esposa enferma de bastante cuidado.
Llegaron a mi poder los libros a que Ud. se refería en su carta. Le agradezco particularmente el que Ud. ha tenido la deferencia de dedicarme. Lo que pienso de él lo he dicho en La Cruz del Sur. Como supongo que al recibir estas líneas ya estarán en su poder los ejemplares que siempre se le mandan, me creo excusado de hacer mayores consideraciones al respecto.
Le adjunto un giro de 38.05 dólares, equivalente a p. 40.00 oro uruguayo, con cuyo importe creo saldar el importe de las remesas de libros y de Amauta. Ruégole que en lo sucesivo me mande únicamente un ejemplar para mí. Le digo esto porque hasta ahora no he hecho más que regalar los números de la revista y los ejemplares de los libros, sin que con ello haya conseguido más que un suscritor, el Dr. Frugoni, a quien también pueden enviársela directamente.
No les aconsejo mandar la revista a libreros porque tropezarían con dificultades en el cobro.
De su libro se han ocupado aquí, además de Zum Felde, el periodista Orestes Baroffio, cuyo recorte le mandé hace tiempo y el Dr. Mora Guarnido, que me dio un largo artículo para el N° próximo de La Cruz. A éstos le he dado ya el libro.
Sin otro motivo, haciendo votos porque esté mejor de sus achaques lo saluda con la invariable simpatía intelectual y personal de siempre su amigo
J.L. Morenza

Nota: —A pedido de Mora Guarnido le envié a Femández Almagro a Madrid un ejemplar de sus Ensayos— Posiblemente se ocupará de él en el diario La Voz -—Vale.

Morenza, Jaime L.

Carta de John A. Mackay, 6/3/1929

Montevideo, 6 de marzo de 1929
Dn. José Carlos Mariátegui,
Lima.
Muy estimado amigo:
Hace poco llegaron a mi poder los dos últimos números de Amauta y un ejemplar de su admirable libro sobre problemas peruanos. No he podido hasta ahora sino saborear este último, pero lo tengo a mano para darle una lectura detenida en las próximas semanas. Me interesa sobremanera el capítulo “El problema religioso”. Tendré ocasión de referirme a sus opiniones en un nuevo libro que estoy preparando en inglés, y que pienso sacar luego en castellano, bajo el título de Fuerzas y tendencias espirituales de la América del Sur contemporánea. La edición inglesa debe salir antes del fin de este año.
No recuerdo hasta qué fecha estoy o estaba suscrito a Amauta. Tengo la impresión de que adeudo a la Administración. En todo caso voy a escribir por el mismo correo al Sr. Karl Johnson de la Asociación Cristiana de Jóvenes para que abone lo que debo y a la vez que pague por adelantado el valor de la suscripción por dos años, a partir de la fecha.
Es muy probable que yo estaré en Lima por el mes de setiembre u octubre próximo, para estarme allí un mes. Tengo grande deseo de conversar largo con Ud. sobre una serie de asuntos. Cuando pienso en Ud. y en la lucha que libra contra dificultades que hundirían a cualquier otro, sólo por estar consagrado a una causa en que cree con la cabeza y las entrañas, yo me siento más fuerte para mi propia obra.
Me complazco, entretanto, en enviarle por separado un ejemplar de mi libro Mas yo os digo y dos artículos míos.
Reciba Ud. los saludos afectuosos y un abrazo de su amigo
J. A. Mackay

Mackay, John A.

Carta de Jorge E. Núñez Valdivia, 15/1/1926

Arequipa, enero 15 de 1926
Señor Gerente de la Editorial Minerva
Julio César Mariátegui
Lima
Distinguido señor:
Doy respuesta a su atta de 31 de diciembre del año próximo pasado.
En ella me comunica Ud. que me han remitido el primer volumen de la Biblioteca Moderna, "La Escena Contemporánea" de José Carlos Mariátegui. Desgraciadamente, dicha obra no ha llegado a mi poder; y este ha sido uno de los motivos por el que no he contestado inmediatamente su mencionada comunicación. Le ruego averiguar lo que haya al respecto, puesto estoy necesitado de la mencionada obra, que en todo caso debe venir como encomienda certificada, para evitar pérdidas.
Adjunto a la presente encontrará Ud. la suma de S/. 1.80 en estampillas, valor de la obra a que he hecho referencia en líneas anteriores. El recibo respectivo queda en mi poder. Muchas gracias.
Les quedaría muy agradecido suministrarme su prospecto y enviarme detalles sobre el Boletín Bibliográfico.
Así mismo, desearía saber cuáles son las ventajas que gozan los suscriptores a la Biblioteca de esa Editorial. Supongo que harán ustedes alguna rebaja, porque de lo contrario no habría ventaja alguna en favor de sus suscriptores. La obra "La Escena Contemporánea, se vende en estas librerías, al precio de S/. 1.80 y a los lectores de provincias que se hallan suscriptos a su Biblioteca les resulta por el precio de S/. 2.20, es decir, con un recargo de cuarenta centavos, valor de la certificación. Ojalá que en su próxima comunicación, me de usted los datos que le pido.
En espera de sus gratas noticias, me repito de Ud. su atto. y S.S.
Jorge E. Núnez

  • Colón Nº 221- Arequipa

Nuñez Valdivia, Jorge E.

Carta de José Carlos Mariátegui a Manuel Adler

Lima, 13 de julio de 1929

Sr. Miguel Adler
E.P.M

Estimado amigo y compañero:
Confirmo a Ud. por la presente el encargo de ha recibido de "Amauta" de llevar su representación a las ciudades del Sur de la República, y de Bolivia, Chile, Argentina, y el Uruguay que visitará Ud. en el curso de próximo viaje.
Quedan a su iniciativa y criterio las gestiones que en pro de la difusión de "Amauta" y sus ediciones, del mejor funcionamiento de sus agencias actuales y del establecimiento de otras nuevas, convenga realizar. Del mismo modo, damos a Ud. amplio mandato para cuando concierne a la representación de "Amauta" y sus ediciones en la Exposición del Libro y el Periódico Peruanos que se propone Ud. efectuar en Santiago, Buenos Aires y Montevideo.
Me es grato reiterar a Ud. en esta oportunidad, al expresarle mis votos por el mejor éxito de su viaje, los sentimientos de mi amistad y mi estima y repetirme su devotísimo amigo y compañero.

Firma de José Carlos Mariátegui

Mariátegui Chiappe, José Carlos

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