Caro amigo: Hasta que me descansen los ojos un poco de tanta claridad solar, le anticipo un saludo para Ud. y los suyos, con toda la cordialidad que les profeso. C. M. Cox
Lima, 11 de julio de 1928 Estimado compañero: Culpe Ud. a mi enfermedad de mi silencio. No he escrito tampoco mucho tiempo a Churata. Con su carta de 23 de abril recibo unos poemas, de los cuales hemos publicado ya uno. He dado todos a la imprenta.- Pronto le escribiré más extensamente. Un cordial saludo de su amigo y compañero. José Carlos Mariátegui