Lima, Perú, 23 de junio de 1928 Mensajero de la Literatura Extranjera, Moscú Queridos camaradas y colegas: Hemos recibido los números 1 y 2 de sus revista, órgano del Pleno de los escritores revolucionarios proletarios, y reproducimos en nuestra revista Amauta, traducidos al español por el camarada Miguel Adler, el prólogo de Lunacharsky, así como la reseña del Pleno del congreso literario. Como la censura en el correo nos priva en la actualidad de todo contacto con el exterior, esperamos continuar recibiendo mensajero, para lo cual pueden usar esta dirección: Ricardina Romero Avenida Bolívar 332 Lima Perú Sud america Con un fraternal saludo comunista para todos los camaradas obreros e intelectuales, ofrecemos incondicionalmente nuestros servicios, deseando que nuestras relaciones no sean interrumpidas.
Talence, febrero 7 de 1930 Sr. Administrador de Amauta Lima, Perú Distinguido Sr. Administrador: Haciendo referencia a mis anteriores del 23, diciembre, 1929; y 14 de enero de 1930, tengo el honor de remitirle una colaboración original de M. Henri Barbusse: La Vuelta Valor: Doscientos francos franceses, en giro sobre París y al nombre de M. Henri Barbusse, mi representado. Espero sus apreciables noticias, y soy su muy atento y obsecuente servidor. Carlos Deambrosis Martins 2,Place Armand Fallières Talence, Gironda, Francia
París, 15 de marzo de 1928 M. Carlos Mariátegui Lima Le envío en pruebas, con todo afecto, este ensayo —ditirámbico— sobre Carlos Mérida, arte americano, en general, así como algunas reproducciones de Mérida y otras de Agustín Lazo, uno de los mejores pintores jóvenes de México como Ud. podrá juzgar, aunque someramente, por las fotografías que aquí van. No sé si Ravines le envió ya unas cuartillas sobre Gómez Carrillo. Esta vez decidí hacerlo yo directamente. La amistad vigilante de Ravines, me informó de la suspensión de Amauta, de su encarcelamiento, de los expulsados, etc. y de la nueva reaparición de su revista que tanto desearía ver siempre. Sigo el esfuerzo de Ud. con mucho interés y créame que les estimo sinceramente. Su afectuoso servidor. L. Cardoza y Aragón